He escogido este libro para releer en las mini-vacaciones, es tierno y sencillo y, a la vez sus frases te hacen reflexionar. Toca al corazón, si eres algo sensible y/o has tenido un familiar o contacto con una persona enferma con demencia. No te preocupes, ni te asustes, no es de llorar y no pasarás un mal rato,¡ yo tampoco estoy en ese momento…!Al contrario , he sentido las ganas de aprovechar y vivir el momento, del cómo decir las cosas sin hacer daño, de respetar los tiempos y los silencios, de cuidar a los tuyos, de disfrutar la familia y atesorar los recuerdos.



